La magia del compañerismo: Una experiencia en la cascada La Astillera
Por Luisana Sofía Villamizar Farnum, Rotary Santiago de Los Caballeros
Mi nombre es Luisana Sofía Villamizar Farnum, tengo 20 años y hoy me encuentro ansiosa porque por primera vez relato una experiencia en esta revista, y no cualquier experiencia sino una extremadamente especial.
El día sábado 13 de abril, me dirigí con 5 jóvenes del Interact Ciudad de los Caballeros a una cascada llamada La Astillera. Esta cascada queda en el sector Santa Catalina de la Ciudad de Mérida y en compañía de un guía de la empresa de turismo llamada Re Linda Venezuela.
La noche antes del paseo, tenía dentro de mí una “mezcolanza” de nervios e ilusión. Pues sería la única representante de mi club rotario (Rotary Santiago de los Caballeros) que acompañaría a los chicos de Interact Ciudad de los Caballeros y que por ende tenía una responsabilidad enorme de cuidarlos y guiarlos en esta travesía y caminos totalmente nuevos para todos nosotros.
Por un momento pensé que lo mejor era contar con el apoyo de otro compañero, pero gracias a Dios me decidí a apoyar y animar a los muchachos a vivir esta experiencia.
Fue un día que sin exageración se quedó marcado en nuestras memorias.
Ese día descubrimos que solo cambiando de espacios pueden florecer matices que no conocíamos sobre nuestros compañeros. Solo saliendo de nuestra rutina, podemos realmente fomentar la amistad.
Vivimos un día en el que cuando era necesario le dábamos la mano al otro para que pudiese pasar más fácil cualquier obstáculo del camino, fue un día en el que reímos con las ocurrencias de los otros, fue en día en el que la ilusión de conectar con la naturaleza nos arrulló, fue un día en el que compartimos la comida y los snacks que cada quién preparó para esta aventura. Fue un día de pensar en equipo más que individualmente.
Quiero invitarlos a que se atrevan a crear este tipo de espacios y brindar este apoyo a sus claves juveniles, porque, aunque al comienzo pueda parecer como una gran responsabilidad y lo es, también es una gran oportunidad para enriquecerse del compartir con los otros. Por favor nunca subestimemos a las personas jóvenes de nuestro distrito, porque sin duda así cómo podemos considerar que tenemos varias cosas por enseñarles, ellos también tienen algunas que enseñarnos a nosotros que podemos hasta ni imaginarlas.
En este paseo descubrí la ilusión que me genera apoyar a los más pequeños, porque ahí fue donde comenzó toda mi carrera Rotaria, a los 14 años en el Interact Ciudad de los Caballeros.
Esta nota, no es más que una invitación a que realicen actividades que fomenten el compañerismo y la amistad entre clubes Rotary, Rotaract e Interact, porque los resultados de las mismas pueden ser increíblemente satisfactorias y aleccionadoras.